De Corazón a corazón: Am 6,1.4-7 ("Cesará la orgía de los sibaritas"); 1Tim 6,11-16 ("Conserva el mandato sin tacha… hasta la manifestación de nuestro Señor Jesucristo"); Lc 16,19-31 ("Murió el pobre –Lázaro- … Murió también el rico")

Contemplación, vivencia, misión: Pasan los siglos y no escarmentamos. Los libros de "historia", salvo pequeños paréntesis,  están llenos de guerras y de opresión. Hasta ofrecen estadísticas sobre los millones de muertos. La realidad es totalmente otra, porque para Dios cada persona es un pedazo de sus entrañas. Un tapiz, visto por detrás, es sólo una amalgama de hilachas. Lo más sencillo y auténtico, que casi nunca se cuenta, queda en el corazón de Dios. Si todas las hojas se secan, ¿por qué poner el corazón en lo que se convertirá en hojarasca? El rico "epulón" revive en la actualidad (como Caín), mientras el pobre Lázaro sigue ansiando las migajas. Al fin, cuando se dé vuelta al tapiz, sólo quedará el amor y aparecerá la verdad.

*En el día a día con la Madre de Jesús: La vida real es más sencilla; en todas partes hay gente buena, sin propagandas ni ruidos, que, alentada por Cristo, quizá sin saberlo, vive amando y sirviendo a los demás en gratuidad, como María de Nazaret.

AÑO DE LA FE: "El creyente aprende a verse a sí mismo a partir de la fe que profesa: la figura de Cristo es el espejo en el que descubre su propia imagen realizada" (Lumen Fidei, n.22). Para Santos Arcángeles, ver Año Litúrgico (Fiestas de Santos).