De Corazón a corazón: Deut 4,1.5-9 ("Escucha, Israel… esta ley que yo os expongo hoy"); Mt 5,17-19 ("No he venido a abolir la ley, sino a dar su cumplimiento")

Contemplación, vivencia, misión: La "ley" era para Jesús la expresión de la voluntad amorosa de Dios para su Pueblo y para toda la humanidad. Dios tiene sed del hombre, invitándole a entrar en la verdadera libertad del amor. Jesús, que es la Palabra personal y definitiva del Padre, pronunciada en el amor del Espíritu Santo, "encarna" toda la ley en su propio ser y la lleva al cumplimiento más perfecto. Nosotros, al "escuchar" a Jesús, nos insertamos en él y nos hacemos, con él, respuesta personal y comunitaria a Dios.

*En el día a día con la Madre de Jesús: María estaba siempre a la "escucha" de la "Palabra". Su vida consistía en acoger y responder a la "Palabra" hecha carne en su seno y nacida para salir al encuentro de todo ser humano.
AÑO DE LA FE: "Infundiendo en nosotros la caridad, el Espíritu Santo nos hace partícipes de la abnegación propia de Jesús: filial para con Dios y fraterna para con todo hombre (cf. Rm 5,5)" (Benedicto XVI, Mensaje Cuaresma 2013). La oración por la elección del nuevo Papa tiene lugar en el "cenáculo" de cada familia y comunidad cristiana