SAM_3701El 10 de Mayo es una fecha importante en la vida de los sacerdotes, de manera especial, del clero secular español, pues celebramos la Fiesta de San Juan de Ávila, Maestro de Santos y recién declarado Doctor de la Iglesia por el Santo Padre Benedicto XVI.

En la Prelatura de Moyobamba lo hemos querido celebrar también de una manera muy especial, acogiendo la invitación que nos hacían nuestros hermanos sacerdotes de Picota, provenientes de Córdoba, ya que allí es dónde, en Montilla, reposan los restos del Santo Sacerdote. Y por ser este un Año Jubilar de San Juan de Ávila, dando gracias a Dios por su reciente declaración como Doctor de la Iglesia, el Obispo de Córdoba ha querido regalar a la Prelatura de Moyobamba dos reliquias de San Juan de Ávila. Una que quedará en la Parroquia de Picota y la otra que Monseñor Rafael ha querido Regalar a los Seminarios de Moyobamba.

La celebración presidida por Monseñor Rafael, Obispo Prelado de Moyobamba, ha estado concelebrada por 15 sacerdotes de la Prelatura. En su homilía Monseñor Rafael ha querido recordar a los sacerdotes que estamos llamados a acoger el don del sacerdocio y a ejecutar el mandato misionero recibido. De aquí, señalaba monseñor, debemos conciencia de la dignidad y responsabilidad recibida, y al mismo tiempo de nuestra indignidad y debilidad.

"Muchas cosas se requieren para cumplir con la obligación del oficio de cura de almas, citaba monseñor a San Juan de Ávila, porque, si miramos a la dignidad sacerdotal que le es aneja, conviene tener  ferviente y eficaz oración y también santidad. Lo cual ha de ser con tanta más ventaja en el cura cuanta mayor y más particular obligación tiene de dar buen ejemplo a sus parroquianos, y de interceder por ellos ante el divino acatamiento de Dios, con afecto de padre y madre para con sus hijos, pues se llama padre de sus parroquianos".

Damos gracias a Dios que sigue haciéndose presente en medio de nosotros a través de sus sacerdotes, y pedimos, por intercesión de San Juan de Ávila y de nuestra Madre María Inmaculada, que no falten en nuestra Prelatura de Moyobamba sacerdotes santos.

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