El Domingo 10 de Junio, unidos a la Iglesis Universal, en la Prelatura de Moyobamba celebrábamos la Solemnidad del Cuerpo y la Sangre del Señor. La Eucaristía Solemne comenzaba a las 7.30 de la noche en una Iglesia Catedral abarrotada de fieles. En su homilia, Monseñor Rafael, reflexionaba sobre el Misterio de la Eucaristía.

"La Eucaristía -nos decía- es el Banquete del Señor, porque se trata de la Cena que Jesús celebró con sus discípulos la víspera de su pasión, es banquete sagrado de la comunión en el Cuerpo y la Sangre de Cristo. (…) La Eucaristía es un sacrificio de acción de gracias por la obra de la creación. (…) La Iglesia ofrece el sacrificio de acción de gracias por todo lo que Dios ha hecho de bueno, de bello y de justo en la creación y en la humanidad. (…) La Eucaristía es un sacrificio porque hace presente el sacrificio de la cruz y aplica su fruto: la redención eterna. En la Eucaristía, el Sacrificio de Cristo se hace también sacrificio de los miembros de su Cuerpo. La vida de los fieles, su alabanza, su sufrimiento, su oración y su trabajo se unen a los de Cristo". Leer más de este artículo