Pidamos la alegría de evangelizar y que los corazones se abran para recibir el anuncio cristiano. «Me gustaría decir a aquellos que se sienten lejos de Dios y de la Iglesia, a los que son temerosos o a los indiferentes: ¡El Señor también te llama a ser parte de su pueblo y lo hace con gran respeto y amor!» (EG 113). «¡Que María nos ayude a ser discípulos y misioneros, pequeñas estrellas que reflejan su luz!» dijo el Papa Francisco, introduciendo el rezo a la Madre de Dios, ante unos cien mil fieles, en la Plaza de San Pedro, en la solemnidad de la Epifanía, manifestación del Señor. Leer más de este artículo